21 de febrero de 2012

El combate en Luís Vives:La ley sin corazón.Memorias grises.

Ayer lunes 20 de Febrero de 2012, unos pacíficos estudiantes del instituto Luís Vives pedían en la calle calefacción para su centro.
La policía reprimió el acto con dureza. Valor, Coraje: El de nuestros estudiantes cumpliendo con sus deberes, los de reiterar sus necesidades y mejorar la realidad rota.
Los universitarios se unen a la protesta por las acciones llevadas a cabo.
La policía no se lo piensa, el jefe manda a todos sus efectivos y como si de una guerra se tratara embisten a los manifestantes sin miramientos, alegando que hay grupos radicales entre ellos, que son insultados y atacados.
Atacados por estudiantes desarmados e insultados quizás porque no tenemos más espada que nuestra viva voz impotente.
Grupos radicales que en gran porcentaje no existan, quizás son ellos mismos, los que buscan las excusas los que las ponen en el tablero de juego...

Rita Barberá dice que es una artimañana de la izquierda.
¿Será que nuestra Alcaldesa no conoce más recurso político u oratorio que atribuir toda queja contra su gobierno a los políticos del otro bando? Mira que es fácil culpar a los demás.
¿Será que lo único con lo que nuestra Alcaldesa sabe ganarse a los votantes, es dando tres saltitos en el balcón del Ayuntamiento en fallas malgastando para los ricos en construcciones recreativas que sólo ellos pueden permitirse? Que bote, que bote... Pero fuera de Valencia.
¿Será que nuestros gobernantes son tan pobres en lides políticas que no saben hacer más que lanzar pelotas de tejado en tejado? Tanto estudiar para luego no saber hablar.

Aquí estoy de nuevo con toda la rabia y la impotencia carganda en mi pecho tras ver el brutal asalto de la fuerzas policiales sobre los jóvenes de esta ciudad, l@s niñ@s, las mentiras desveladas por la imágenes, los rumores, los inventos de una política que sin ellos no es capaz de subsistir y en parte porque en esta triste ciudad somos ineptos selctores.
Valencia podría arder antes de fallas, ya hay una brasa prendida dentro de cada uno de los que hemosllorado contemplado la violencia de las fuerzas del supuesto orden.
Grises. Memorias grises viene a mi mente. Talvez yo no las haya vivido pero me las han transmitido en la historia social.
"No teneis corazón" gritaba un estudiante mientras cargaban contra los compañeros.
Y no, no deben tener corazón, mandados posicionados a la derecha del político padre, sin alma ni poder de decisión, marionetas escudadas y emporradas, protegidas hasta la médula de insultos que no rasgan ni el viento, personas, trabajadores, policías y sin embargo dan una visión meramente cobarde.
Atacados con piedras. ¿Qué piedras? Serán las piedras que llevabamos por mochilas llenitas de libros de texto que parece que nada sirvieron.
Acabados estamos como sociedad civilizada, el pacifismo no puede hacer más que morir ante tan injusta gesta, caballeros contra labradores.
¡Palleter! Espíritu de Valencia, ¿dónde estás?
No, no es que yo abogue por la violencia, no es que quiera destruir el lugar donde vivimos, es que estoy cansada de ver como se nos degrada, es que esto va arebentar de dolor.
Nos pisotean y salimos en la calle armados con pancartas y gritos una y otra vez, somo Aves Fénix resurgiendo de las cenizas de la incompetencia de nuestros gobernantes, aguantamos con los cojones anchos, cuadrados, redondos... a eso de momento no nos ganan, a cojones, a seguir luchando por la vía pacífica a pesar de vuestros palos paletos, cojones que les falta a otros para ver y sentir esta puta realidad que se nos atraganta.
No dejaremos que nos tacheis de lo que no somos y si cuatro gilipollas aprovechan para armar follón, intenta ser más avispado que para eso te han entrenado y catiga a quién debas.
Aquello de pagar justos por pecadores es una frase hecha, un logo fácil para seguir machando a la masa. Pues bien, la tendremos que cambiar.
Ya no más justos por pecadores, ya no más excusas, si quereis dar golpes coged un saco de arena, empotrad las cabezas descubiertas contra la pared, romped vuestros nudillos rompiendo los espejos de vuestros baño pero a los menores dejadlos en paz. Debría ser considerado maltrato.
Atacar a todo peatón con vuestras simples ganas de pegar, sin ton ni son.
Ojo por ojo y el mundo acabrá ciego...
Ciegos ya estamos.
Algunas madres dicen: "No vayas que te darán de palos"
Yo contesto: "Si es que hay que estar, si lo bueno sería llenar el centro hasta ahogarlos en nuestros gritos de protesta, hay que ir con cuidado, si porque estos mierda que ven mierda que pisan pero hay que estar".

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